Resumen
Querétaro se encuentra en un punto crítico de su desarrollo. Las decisiones que se tomen en materia de movilidad y urbanismo definirán su sostenibilidad y calidad de vida en las próximas décadas. Es urgente la implementación de estrategias integrales que permitan enfrentar los retos actuales y garantizar una ciudad ordenada, eficiente y habitable para las futuras generaciones. La planificación y la visión a largo plazo son clave para convertir a Querétaro en un modelo de desarrollo urbano y movilidad en México.
Capítulo 1
Antecedentes y Evolución Urbana
El crecimiento acelerado de la ciudad de Querétaro y su zona metropolitana es un fenómeno que ha transformado radicalmente la región desde mediados del siglo XX. Este desarrollo exponencial se debe, en gran parte, a la política de industrialización implementada en el estado a partir de 1961, lo que generó un fuerte impulso económico y demográfico.
A principios de la década de 1960, Querétaro era una ciudad con poco más de 50,000 habitantes, con una estructura urbana compacta de estilo europeo, caracterizada por una trama ortogonal densa en su centro histórico y periferias menos pobladas. Sin embargo, con la llegada de la industrialización, impulsada tanto por la iniciativa privada como por políticas gubernamentales, la ciudad experimentó un crecimiento sin precedentes.
Empresas como ICA desempeñaron un papel fundamental en la expansión industrial de Querétaro, facilitando el establecimiento de industrias manufactureras, de maquinaria y de ensamblaje. Como consecuencia, la demanda de vivienda aumentó drásticamente, generando una rápida urbanización para albergar a obreros, mandos medios y ejecutivos. Entre 1961 y 1971, el ritmo de crecimiento fue tan acelerado que debió haber encendido alertas entre las autoridades. Sin embargo, los cambios sexenales en el gobierno y la falta de planes de desarrollo de largo plazo impidieron una respuesta adecuada.
Falta de Planeación y sus Consecuencias
La ausencia de una estrategia integral para gestionar el crecimiento urbano ha generado problemas significativos en la movilidad y el transporte en la ciudad. Un desarrollo urbano sostenible debe considerar factores humanos, académicos, comerciales y, sobre todo, de movilidad eficiente. El traslado de personas y mercancías debe ser ágil, seguro y eficaz para evitar colapsos viales y minimizar tiempos de desplazamiento.
Querétaro se ha consolidado como un polo de desarrollo nacional y un punto de atracción para nuevos residentes debido a su ubicación estratégica, clima favorable, baja sismicidad, oferta educativa y valor histórico. Además, su papel como enlace entre la Ciudad de México y el norte del país ha fortalecido su crecimiento. Sin embargo, el crecimiento urbano no ha sido acompañado por la infraestructura adecuada para sostenerlo.
En la actualidad, la capital queretana cuenta con aproximadamente 1.5 millones de habitantes y sigue sin contar con un plan maestro de desarrollo urbano eficiente. La movilidad en la ciudad se basa en ejes viales que fueron diseñados hace más de cinco décadas, lo que ha generado una saturación crítica de las vialidades principales. Un ejemplo emblemático de este problema es el Boulevard Bernardo Quintana, originalmente planeado para desviar el tránsito pesado hacia el norte del país, pero que actualmente opera a una velocidad promedio de 7 km/h debido a la alta demanda vehicular y a un parque vehicular caracterizado por una baja ocupación (1.4 personas por automóvil).
Expansión Periférica y sus Repercusiones
Otro problema crítico es la dispersión descontrolada de desarrollos habitacionales en la periferia, los cuales han sido concebidos sin una adecuada planificación en conectividad y transporte. Muchas de estas zonas habitacionales dependen de avenidas principales que desembocan en el centro histórico, exacerbando los problemas de tráfico y congestionamiento. La falta de infraestructura de transporte masivo eficiente ha contribuido a una dependencia excesiva del automóvil particular, generando costos ambientales, económicos y de calidad de vida para los ciudadanos.
Hacia un Futuro Sostenible
Para garantizar un desarrollo urbano sostenible y mejorar la movilidad en Querétaro, es imperativo implementar medidas urgentes y estructuradas. Algunas soluciones viables incluyen:
- Planificación Urbana Integral: Desarrollo de un plan maestro de urbanismo que contemple el crecimiento ordenado de la ciudad con infraestructura moderna y eficiente.
- Transporte Público de Calidad: Inversión en sistemas de transporte masivo sustentables como trenes ligeros, autobuses de carril exclusivo y sistemas de movilidad alternativos.
- Infraestructura Vial Inteligente: Modernización y ampliación de vialidades clave, incorporando tecnologías de gestión del tráfico y priorización del transporte público masivo subterráneo y superficial.
- Fomento a la Movilidad No Motorizada: Creación de ciclovías seguras, espacios peatonales y esquemas de movilidad compartida para reducir la dependencia del automóvil particular.
- Descentralización de Servicios: Impulso de nuevos polos de desarrollo económico y comercial en la periferia para reducir la concentración de actividades en el centro histórico aprovechando el sistema de localidades en la zona metropitana formada por Querétaro-San Juan del Río-Aeropuerto Internacional- Zonas Industriales.
Conclusión
Querétaro se encuentra en un punto crítico de su desarrollo. Las decisiones que se tomen en materia de movilidad y urbanismo definirán su sostenibilidad y calidad de vida en las próximas décadas. Es urgente la implementación de estrategias integrales que permitan enfrentar los retos actuales y garantizar una ciudad ordenada, eficiente y habitable para las futuras generaciones. La planificación y la visión a largo plazo son clave para convertir a Querétaro en un modelo de desarrollo urbano y movilidad en México.
Vialidad y Transporte en Querétaro y su Zona Metropolitana
Capítulo 2
El impacto del crecimiento poblacional y la movilidad en Querétaro
El desarrollo urbano de Querétaro ha estado marcado por acontecimientos que han impulsado su crecimiento de manera acelerada. Uno de los más significativos fue el macrosismo de 1985, de magnitud superior a 7° en la escala de Richter, que afectó severamente a la Ciudad de México y su zona metropolitana. Ante la crisis generada, Querétaro, considerado una región prácticamente asísmica, atrajo una inmigración repentina de personas y negocios. Esto generó un aumento en el tráfico vehicular, provocando un boom poblacional y económico que consolidó a la ciudad como un polo de desarrollo, pero también planteó nuevos desafíos en cuanto a la densificación urbana y la movilidad.
La planeación del desarrollo urbano hasta 1971, formulada con base en la industria y la población proyectadas en aquel momento, se tornó insuficiente para albergar a la creciente población y los nuevos negocios que surgieron tras 1985. Este fenómeno se replicó en años posteriores, generando un incremento en las poblaciones vecinas como San Juan del Río, Colón, Ezequiel Montes y, de manera significativa, el municipio de El Marqués, donde se desarrolló un nuevo aeropuerto.
El aeropuerto de El Marqués, concebido inicialmente entre 2000 y 2006 como un centro de asistencia de carga para el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, ha evolucionado gracias a la expansión de sus pistas y la incorporación de nuevas rutas comerciales, especialmente hacia Norteamérica. Su crecimiento ha impulsado un corredor industrial y poblacional que ha generado una fuerte congestión en la autopista entre San Juan del Río y Querétaro. El incremento del tráfico ha convertido este tramo en una vía urbana con características similares a las de cualquier avenida de la Ciudad de México, afectando la movilidad de la región.
Tal como mencionamos en el Capítulo 1, desde 1971 se identificó la necesidad de un plan de desarrollo urbano integral, que considerara la creación de avenidas de tránsito fluido y la implementación de un sistema de transporte colectivo. La planificación de dicho sistema puede abordarse desde dos perspectivas: desde el centro hacia la periferia o viceversa. En diversas reuniones con organizaciones como el Colegio de Ingenieros Civiles de Querétaro, hemos insistido en la importancia de esta planificación. No obstante, el rápido crecimiento poblacional nos ha obligado a pasar de la planeación preventiva a la implementación de soluciones urgentes, que, aunque no ideales, deben responder a la realidad del desarrollo actual.
Ante este crecimiento desbordado y la proliferación de desarrollos poco armonizados, es crucial establecer prioridades y definir un esquema de planeación desde la periferia hacia el centro. Esto implica considerar la consolidación de una gran zona metropolitana desde San Juan del Río hasta Querétaro, integrando las comunidades intermedias y optimizando la conexión con el aeropuerto en expansión. Este aeropuerto ha cobrado relevancia no solo por su volumen de carga y pasajeros, sino también por su función como punto de interconexión con Estados Unidos, el resto del país, y rutas internacionales hacia Europa y Asia, dada la limitada operatividad del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México.
Además de la infraestructura aeroportuaria, la red vial de Querétaro y su periferia requiere un estudio profundo para la implementación de soluciones de movilidad eficientes. Hemos insistido en la necesidad de establecer un equipo multidisciplinario permanente que analice aspectos clave como los estudios de origen y destino de pasajeros, densidades poblacionales reales, volúmenes de carga y pasajeros transportados, y adaptaciones necesarias para futuros proyectos de movilidad, ya sea metro, tren ligero o sistemas vehiculares. Contar con estos estudios previos facilitará la toma de decisiones y optimizará el tiempo en la ejecución de proyectos.
Cabe destacar que la zona industrial del municipio de El Marqués alberga industrias con capacidad para fabricar hasta el 85% del equipamiento necesario para cualquier sistema de transporte seleccionado. El 15% restante requeriría importación de componentes especializados, los cuales serán determinados según la opción elegida. Existen competidores internacionales en este mercado, por lo que es fundamental garantizar que cualquier solución adoptada cumpla con los estándares de eficiencia y seguridad.
El plan de desarrollo estatal y el plan urbano de movilidad y transporte deben concebirse como proyectos continuos, sujetos a investigación y actualización permanente. La suspensión de estos esfuerzos podría generar problemas a corto, mediano y largo plazo, afectando el crecimiento ordenado de la región. Mantener una inversión constante en estos estudios minimizará costos y garantizará una mejor planificación urbana y suburbana.
Finalmente, como mencionamos en el Capítulo 1, el fomento a la movilidad no motorizada debe ser una prioridad. Es necesario implementar una señalización adecuada y aprender de experiencias internacionales. No obstante, la transición hacia un modelo de transporte más sostenible requiere un cambio de mentalidad y un proceso de educación y promoción intensivo para modificar los hábitos de movilidad en una sociedad acostumbrada al uso del automóvil como medio principal de transporte.
En los siguientes capítulos, abordaremos la necesidad de descentralizar los servicios y fomentar nuevos polos de desarrollo en municipios como Cadereyta, Ezequiel Montes y Bernal. La creciente industria vitivinícola y alimentaria de la región representa una gran oportunidad para la economía estatal y podría contribuir a equilibrar el crecimiento de Querétaro, posicionándolo como un modelo de planeación y desarrollo sostenible en México.